El primer ministro australiano Anthony Albanese condenó el lunes el vandalismo del consulado de Estados Unidos en Sídney después de que el edificio fuera vandalizado en lo que los medios locales dijeron que parecía ser una protesta pro-palestina.
El edificio en los suburbios del norte de la ciudad más grande de Australia fue atacado y rociado con pintura por una persona que llevaba un pequeño martillo a eso de las 3 de la madrugada hora local del lunes, dijo la policía de Nueva Gales del Sur.
"Simplemente diría que la gente debería tener un debate político y discurso respetuosos", dijo Albanese en una conferencia de prensa televisada desde Canberra cuando le preguntaron sobre el incidente.
JUST IN: Police are investigating after the US Consulate in North Sydney was vandalised early this morning.CCTV shows a person wearing a dark-coloured hoodie with their face obscured damaging nine windows with a small sledgehammer and painting graffiti on the door. #9News pic.twitter.com/pGtfSNPtCz
— 9News Australia (@9NewsAUS) June 10, 2024
"Medidas como pintar el Consulado de EE. UU. no hacen nada para avanzar en la causa de aquellos que han cometido lo que, por supuesto, es un crimen de dañar propiedad", agregó.
"Se ha obtenido video de CCTV que muestra a una persona usando una sudadera de color oscuro con el rostro tapado llevando lo que parece ser un martillo pequeño de mano", dijo un portavoz de la policía a Reuters por teléfono.
Fotos del consulado en el sitio web del periódico Sydney Morning Herald mostraban triángulos rojos invertidos rociados en la fachada del edificio. Según se informó, el símbolo es utilizado por algunos activistas pro-palestinos.
El mismo edificio fue vandalizado con grafitis en abril, mientras que el consulado de Estados Unidos en Melbourne fue graffiteado por activistas pro-palestinos en mayo, según el periódico.
Durante mucho tiempo, Australia ha sido un firme aliado de Israel, pero ha comenzado a criticar cada vez más su comportamiento en Gaza, donde un trabajador de ayuda australiano fue asesinado en un ataque israelí a principios de este año.
El mes pasado, se organizaron campamentos en universidades en Sídney, Melbourne, Canberra y otras ciudades australianas para protestar contra la guerra de Israel en Gaza y afirmar que el gobierno australiano no ha hecho lo suficiente para promover la paz.